A pesar de que el título parezca contradictorio hay hombres que están tan obsesionados por su físico que muchas veces descuidan su salud. La enfermedad se llama vigorexia o “anorexia de los hombres” y se caracteriza por una distorsión del esquema corporal y no tiene que ver estrictamente con la alimentación sino con una forma irreal de ver su cuerpo.
Para que se entienda podemos decir que un vigoréxico es aquel que practica ejercicios en exceso (gimnasia, musculación y otros) con el propósito de verse mejor cada vez, ya que se ve sin atractivo físico.
Para que se entienda podemos decir que un vigoréxico es aquel que practica ejercicios en exceso (gimnasia, musculación y otros) con el propósito de verse mejor cada vez, ya que se ve sin atractivo físico.
La vigorexia es un trastorno psicológico y allí se ponen en juego valores morales y sociales que el hombre fue adquiriendo durante su vida, según dicen los especialistas. Aquí entran en juego la belleza masculina y el valor de las persona, pero visto desde lo físico, olvidándose del aspecto humano y cambiando la concepción del mundo.
Podía pensarse que los hombres no piensan en la imagen de su cuerpo, algo tan común en las mujeres, pero sin embargo las investigaciones revelan que la estética corporal es tenida muy en cuenta. La preocupación más común en el género masculino es la obsesión por incrementar la musculatura y esto es transmitido la mayoría de las veces por la familia, los amigos, la publicidad, los medios de comunicación y otros factores sociales.
Podía pensarse que los hombres no piensan en la imagen de su cuerpo, algo tan común en las mujeres, pero sin embargo las investigaciones revelan que la estética corporal es tenida muy en cuenta. La preocupación más común en el género masculino es la obsesión por incrementar la musculatura y esto es transmitido la mayoría de las veces por la familia, los amigos, la publicidad, los medios de comunicación y otros factores sociales.
Según los especialistas el tener un cuerpo con mayor musculatura haría que el hombre sea mejor aceptado por las mujeres y esto lleva, cuando se transforma en una obsesión, a la ingesta de anabólicos y esteroides, lo que deteriora la salud del individuo.
Para concluir mencionaremos algunos síntomas de esta enfermedad llamada vigorexia: el pasar muchas horas diarias en el gimnasio levantando pesas, excesiva atención a las dietas, mirarse constantemente en el espejo, llevar un registro pormenorizado de todo lo que se come y bebe, entre otros. Todo esto puedo llevar a consumir alimentos y remedios muy peligrosos para la salud y hasta ilegales.
Luego de este breve resumen de la enfernmedad vale la pena preguntarse y reflexionar: ¿no es mejor ser sano, aunque no estemos perfectos de físico y tengamos una pancita?. La respuesta está en cada uno de nosotros.
desde mi parte, esto lo deje atras, y fue una etapa de mi vida en la que solo me preocupaba x cuanto mas ejercico podia hacer y era mas que una actividad unestilo de vida, en el cual mi cuerpo era el todo y llenaba el vacio que habia en mi.
maximiliano viñals
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